El Señuelo

Saliendo del mercado oculto entre los escombros de lo que era una fábrica me disponía a llevar provisiones a los míos. Atravesando las cañerías y ocultándome de los centinelas llegue a un claro donde seguro seria un blanco fácil y quise regresar, pero algo me detuvo. Era el cielo, tan despejado y tan nocturno, no lo podía creer.. hacia años que no veía algo así, casi ni recordaba el nombre de los luceros q se distinguían en el.. ¿como se llamaban?.. Estrellas! Y casi idiotizada di unos pasos en dirección al claro. Era tan bello.. por mi mejilla negra por las cenizas corrió una lágrima, pero no me deje llorar. Mi abuela me lo había contado.. ella conocía este cielo, yo no.
Las nubes toxicas de la guerra nos habían privado de lo único q mantenía a nuestras almas con fe.. aunque de colores grises el cielo aun se distinguía cuando era pequeña.. pero las guerras seguían.. y luego solo fueron nubes negras q todo lo cubrían, el sol, la luna... nuestras esperanzas. Sentí mi cuerpo ligero.. y estire mis manos hacia las ¿estrellas?
El claro en el cielo, ese hueco entre las nubes.. su belleza me atraía.. nunca había visto nada parecido.. tanta paz. Cerré mis ojos y camine.. con los brazos alzados a su inmensidad.
Todo se puso en blanco repentinamente.. y puedo ver mi rostro sonriente sobre una montaña de cadáveres.. indescriptible. Todos los rostros.. fríos.. y grises por las cenizas del ambiente.. mantenían una sonrisa fija y los ojos aun abiertos.. éramos alrededor de 200 civiles. Me llaman y me vuelvo.. y veo hacia donde van todos.. hacia esa luz..

Mas espectacular que la de las ¿estrellas?
Y Voy.